Con el pasar del tiempo nuestras preferencias, necesidades y manías cambian, de igual forma nuestras capacidades y manera de hacer las cosas. Esto nos lleva a hablar de la edad, no es lo mismo buscar un coche cuando se es joven a cuando estamos en los años de plata, por eso hay que prever necesidades muy diferentes a las que solíamos tener a la hora de elegir un vehículo nuevo cuando se es un adulto mayor.
Años más o menos no deben detenernos si aún nos mantenemos jóvenes de espíritu y sabemos y aceptamos nuestras limitaciones.
Saber elegir
A continuación mostramos algunas de las características más importantes que se deben considerar para que nuestro bólido se adapte a esta nueva etapa de vida:
- Tamaño: piense en el uso que quiere dar, si es un coche grande tendrá mayor espacio para acompañantes y equipaje pero le será complicado estacionarse y si es muy chico no se sentirá nada cómodo, además suelen ser bastante bajos.
- Asistente o cámara: con la edad, el cuerpo no tiene la misma facilidad de torsión y la vista no es tan nítida. Por tal razón, es preferible que tenga cámara trasera, incluso algunos modelos tienen sensores que emiten sonidos para alertar sobre la dirección o distancia.
- Salpicadero o tablero: los botones que este contenga deben ser suficientemente grandes para que no se tenga problemas para pulsarlos, también asegúrese de poder comprender el manejo del computador.
- Comodidad: es imprescindible para una persona mayor, deben ser asientos amplios y de buena altura, preferiblemente con posa cabeza.
- Asistencia de conducción: a edad avanzada se tiene mucha experiencia pero los reflejos no son los mismos. Es recomendable que el coche incluya antibloqueo de frenos y control de estabilidad y tracción. Si adicionalmente dispone de un controlador que ajuste la velocidad crucero, será más placentero y cómodo.
- Maletero: es preferible que tenga suficiente capacidad, algunos modelos abren automáticamente, que es una ayuda para no hacer el esfuerzo de subirlo.
En un desguace quizás no encontrará un vehículo de segunda mano que se le ajuste, pero si ya usted tiene su coche ideal y necesita reparar averías para no perderlo, entonces los desguaces de automóviles son su salvación. En Internet hay diferentes directorios que le permiten contactarlos sin necesidad de salir de casa, en pocos clics tendrá a su disposición las piezas que usted necesite para que su bólido vuelva a ser su compañero fiel de siempre.